Army of one

Army of One es el documental que resultaría si un cámara siguiera a Nicolas Cage en un viaje a Pakistán dentro de unos 10 años. Como no podemos esperar tanto, se decidieron a hacer la película ya. El film consta de dos partes, en la primera, vemos a Cage comentar a cualquiera que se le cruce que va a Pakistán a capturar a Bin Laden. En la segunda parte, una vez en el país asiático, preguntando por el "barbudo", sobrenombre del famoso terrorista, a todo aquel que se le cruce. Una premisa sencilla e igualmente aburrida.

Esta es la primera película intencionadamente cómica de Nicolas Cage y, como tal, fracasa miserablemente. Face Off, con esa sí que te partes el culo, siempre que vayas fumado, claro. Junto a él, aparece el inglés de las greñas que se tiró a Katy Perry en el papel de dios, que es quien le encomienda iniciar la caza del saudí. El plantel lo completan un buen montón de árabes que se ríen de él.

Si como telefilme de fin de semana de Antena 3 fracasa miserablemente, funciona muy bien como publirreportaje de Pakistán porque da una imagen normal del país, al menos todo lo normal que puede ser un sitio donde las mujeres hacen aerobic con burka y se solucionan las disputas a golpe de Kalashnikov. A mí me han dado ganas de ir, claro que también me gusta nadar en vinagre.

Los más soñadores verán en esta cinta una historia sobre el sueño americano, donde un vagabundo loco puede rehacer su vida, conseguir un trabajo, una casa, tener la oportunidad de casarse con una atractiva rubia, formar una familia y arruinarlo todo en pos de la seguridad nacional. Eso en España no pasa. Nuestro ascensor social está en el aeropuerto de Castellón, esperando que algún día alguien se monte en él, preguntándose qué alberga el brillante cielo de los pisos superiores.

Lo único destacable es una escena autoreferencial y una mención a Con Air, la mejor película que ha hecho y hará Nicolas Cage en su vida. 

Me ha quedado una reseña bastante pobre pero es que la película no da para más. Sale Matthew Modine superviejo. A este no le invitan a hacer rituales de magia negra los de Hollywood, eso está claro. La idea era muy buena pero tenía un lastre insalvable. Al estar basada en un hecho real, las licencias que se podían tomar eran escasas, empezando por lo atractiva que es la rubia con la que se empareja el protagonista, y terminando por la niña en silla de ruedas para la que viajaron en el tiempo a 1988, secuestraron a la rubia mediana de Padres Forzosos y la trajeron de vuelta a 2016. El resto es muy convencional.

Por si alguien está interesado, el protagonista no logró capturar a Bin Laden pero sí que se atribuyó el haber hecho que este se moviera de su escondite, siendo posteriormente localizado por los valientes muchachos del Team Six de los Navy Seals con erótico resultado.