Resulta que el episodio anterior, queriendo saltar las partes en las que el niño hijo de puta hacía de las suyas, no vi cómo Eph y Sexy Ebony encontraban una granja de humanos a los que los vampiros pastorean para procurarse el sustento, controlar a la población y matar a todos los urbanitas de poquito a poco mientras estudian cómo maximizar el uso de la sangre humana sin tener que mantener las carreteras y las autopistas ya que no existe un gobierno que las rescate. Por cierto que echo de menos saber algo sobre lo que ocurre en el resto del mundo. Vale que en los libros tampoco dicen gran cosa, pero bueno... Parece que solo existan Nueva York y cercanías cuando se supone que los strigoi dominan todo el orbe. Tras ello, volvían a Nueva York.
Al igual que Fett, Quinlan y Secundario Negro #2, que aterrizan en un aeropuerto del condado y son recibidos al instante por una patrulla de strigoi que muerden el polvo fácilmente. ¿Por qué no envía el Maestro en ese momento a todo bicho viviente a su posición? Porque el guión así lo demanda. El caso es que quieren introducir la bomba nuclear en Manhattan, pero no es fácil, y mucho menos cuando el hindú malvado vuela todos los puentes y túneles que llevan a la isla. Aunque por suerte a Eph y señora les ha dado tiempo a cruzar al otro lado. No volveremos a saber más del trío calavera, nunca mejor dicho, hasta el próximo episodio, cosa lógica porque en cuanto tengan la bomba lista... ¡boom!
Este capítulo está centrado en Setrakian y Gus, aunque especialmente en el primero. Después de escapar con Rubia Hacker Emo del centro nazi de experimentación, vuelven a recoger sus cosas, básicamente la espada y el Óxido Lumis. Para pasar la noche escogen... creo que un museo, pero no estoy seguro. Como es muy aburrido ver la vida en pareja de un viejo y una post-adolescente, a menos que esté subido en Xvideos, surgen los problemas, Setrakian está enfermo. O viejo, porque se descubre que tiene 95 años. El caso es que cuando se ha hartado de arrancar las páginas del libro y pegarlas en las paredes como un esquizofrénico cualquiera, le da un parraque y pierde el conocimiento.
Justo en ese momento, meándose en los Deus Ex Machina de Juego de Tronos, aparecen por el lugar Eph y Sexy Ebony. Que vale que fuera uno de los puntos de encuentro del grupo de resistencia, predefinido con anterioridad, pero imagino que habría más. Pero bueno, quedan ya dos episodios y no pueden esperar a que se encuentren de camino a comprar el pan. Para conseguir las medicinas que necesita el profesor para recuperarse, acuden al Amable Gus, que vuelve a dejar en ridículo al negro de los dientes de plata, al que se le inflan los cojones y decide denunciar a los maderos. Claro que como no hay, va a ver al hindú malvado, que para el caso es lo mismo. Muy listo no es, porque le llevan en presencia del Maestro, que se lo papea en menos tiempo del que tarda en pelar una mandarina.
Las medicinas que le ha traído Eph no son suficientes para Setrakian, es el anticoagulante que usaron para matar a miles de vampiros en un edificio hace un par de episodios. Si se toma más de una, la puede diñar. Y ya decía yo que este dato era por algo. Al igual que desde que le daba el parraque al principio, se veía venir que el profesor iba a morir. Para recuperarse nada mejor que la medicina china, le dice Setrakian a Eph, al que manda junto a Rubia Hacker Emo a que cueza un gusano de Strigoi para beberse el caldo y recuperar energías.
Todo está preparado para el gran final. Gus, con la conciencia espoleada por un comentario hiriente que Setrakian le dedicó un par de escenas atrás, decide volver a luchar contra los vampiros, y junto con su familiar #6 se dirigen al museo armados hasta los dientes. Pero antes llega Eirchost, junto con el Negro de los dientes de plata y un par de figurantes. Y aquí le decimos adiós a Sexy Ebony, que se había quedado de niñera, con el cuello roto por el negro vampiro para que no le puedan acusar de racista, y la serie baja enteros en el índice de follabilidad.
La siguiente escena creo que tiene el récord de muertes que se evitan en el último momento. Gus salva a Setrakian, Setrakian salva a Gus, a Setrakian ya no le salva nadie porque Eirchost al final le muerde y le chupa la sangre, pero... ¡se ha tomado las pastillas anticoagulantes! por lo que Eirchost está envenenado de muerte, y después de un speech emocionante hasta las lágrimas dirigido al Maestro, le corta la cabeza al nazi, y decimos adiós a uno de los mejores villanos de la historia reciente de la televisión. Quedan tres capítulos y creo que su lugar lo ocupará el niño hijo de puta, para el que espero que no haya redención, solo dolor, mucho dolor y muerte.
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